
La proliferación de robos en la totalidad de los establecimientos hosteleros de Otxandio durante el último año, ha llevado al Ayuntamiento a solicitar una reunión con los responsables comarcales de la Ertzaintza con la finalidad de dar alguna solución a ese problema.
“Durante el último año los ladrones han entrado en todos los bares de Otxandio, en algún caso hasta en cuatro ocasiones”. Además, los propietarios de los negocios han podido comprobar que cada vez que los ladrones vienen al pueblo, son un par de bares los que son objeto de la acción de los delincuentes.
Puertas forzadas
En la mayor parte de los casos los asaltantes revientan las máquinas recreativas y se apoderan del dinero, así como de los cambios que quedan en la caja registradora. Por lo tanto, aunque la cuantía de los robos puede variar, los titulares de los negocios se ven afectados por los destrozos ocasiones al forzar las puertas para acceder a los establecimientos.
La inexistencia en el Ayuntamiento de Policía Municipal lleva a la Ertzaintza a asumir en la localidad las labores de seguridad ciudadana, aunque su eficacia resulta a todas luces insuficiente. Aunque los agentes de la policía autonómica se acerquen a la localidad tres o cuatro veces al día, su presencia es fácilmente detectable por los delincuentes; “se les puede ver desde que están bajando Urkiola”, sostienen.
Fuentes municipales reconocen que “durante la noche Otxandio es un municipio desierto” lo que facilita la labor de los ladrones.
Ante la persistencia de los robos, los hosteleros y comerciantes del municipio, junto con los responsables municipales, prevén reunirse “en breve” con los responsables de la Ertzaintza en la comarca para intentar poner fin a los asaltos.