
El ciclismo es un deporte que fortalece el corazón. Y no solo físicamente. Los participantes en el proyecto Helmugak-EuSport van a demostrarlo al tomar parte en tres duras carreras de bicicleta de montaña con el fin de recaudar fondos para la ONG durangarra La Otra Mirada.
Su primer destino será Ulán Bator, hacia donde partirán este martes. Su objetivo, participar en la Mongolia Bike Challenge, que se disputará del 13 al 18 de agosto en seis etapas de más de 100 kilómetros por encima de los 3.000 metros de altitud. El equipo en esta primera prueba estará compuesto por el piloto de rally Ander Txakartegi, el otxandioarra Koikili Lertxundi y el cocinero zornotzarra Beñat Ormaetxea.
“La iniciativa partió de Ander que, hace un par de años, tomó parte en la Titan Desert en Marruecos”, explica Ormaetxea. “Organizó por su cuenta una recogida de fondos y alimentos, pero se dio cuenta de que era mejor colaborar con una organización que ya trabajara en la zona para coordinarlo todo”.
Cuando decidió participar en la próxima edición de la Mongolia Bike Challenge, buscó alguna ONG con proyectos en ese país, y así se puso en contacto con La Otra Mirada. También contó con la ayuda de Koikili, y su empresa EuSport, para poner en marcha la iniciativa.

Mejorar la calidad de vida
La Otra Mirada lleva vinculada a Mongolia desde el 2011. Actualmente trabaja en la ampliación de un centro de día para niños discapacitados que pusieron en marcha hace tres años. “Se trataba de un pequeño hospital del que rehabilitamos la parte de abajo, y ahora queremos acondicionar la segunda planta”, explica Marisa Parejo, desde la asociación humanitaria.
Parte de la financiación será cubierta con la venta de vales, al precio de un euro, que están a la venta en las tiendas de Forum Sport de Abadiño y Eibar. Se sortearán dos lotes de material deportivo donado por la empresa —“que se ha volcado con el proyecto”— y por varios ciclistas gracias al esfuerzo de Helmugak-EuSport y al resto de patrocinadores.
“Los niños que atendemos en Mongolia tienen todo tipo de carencias: material ortopédico, médicos, oculistas, dentistas… Muchos de ellos, incluso, están sin diagnosticar”, añade Parejo. Gracias a la ampliación de su centro de día, podrán prestar servicio a cerca de 20 pequeños “y mejorar su calidad de vida”.
Vía de escape
Esta labor podrá ser conocida en primera persona por los tres participantes en la carrera. “Vamos a ir un par de días antes de comenzar la prueba para ver in situ la labor de La Otra Mirada”, comenta Ormaetxea. Después, será el turno de la parte estrictamente deportiva de la iniciativa.
“Lo más complicado será regular las fuerzas para llegar con las energías suficientes a la última etapa, ya que no habrá apenas tiempo de recuperación entre una y otra”, detalla. Además, el esfuerzo aumentará a causa de la altitud, para la que el zornotzarra se ha aclimatado en el campo base que tuvo Alex Txikon en su reciente aventura en el Everest o, más recientemente, en un volcán ecuatoriano de 6.000 metros.
“Soy cocinero, pero siempre he considerado al deporte como mi psicólogo y mi vía de escape”, confiesa. “A pesar de no tener el nivel físico de Koikili, que es un portento, siempre me han atraído los retos y soy muy cabezón, así que confío en que terminaremos la carrera”, apuesta.
Tras la experiencia en Mongolia, el equipo Helmugak-EuSport tiene intención de tomar parte en la Titan Tropic de México, este diciembre, y en la BC Bike de Canadá, en julio del 2018.