Semana Europea de la Movilidad Sostenible

Próximamente, del 15 al 22 se septiembre se “celebrará”, como ya es costumbre, la Semana Europea de la Movilidad Sostenible y esto me lleva a una reflexión sobre cuáles son los “deberes” que tenemos pendientes en este asunto en nuestro municipio.

Con relación a la potenciación del uso de la bicicleta, la verdad sea dicha en los últimos tiempos vamos para atrás en vez de hacia delante, ya que la desaparición del carril-bici a su paso por el barrio de San Fausto integrándolo en el mismo vial destinado a los vehículos a motor, aumenta el riesgo y desincentiva el uso en una zona de paso habitualmente utilizada, entre otros, por familias con niños.

También dentro de la movilidad sostenible podríamos incluir la transformación de la antigua trama ferroviaria en un eje este-oeste peatonal y ciclable, una infraestructura de la que ya quisiera poder disponer cualquier municipio, y que sin embargo, en el nuestro no avanza, según parece, por la falta de entendimiento entre instituciones gobernadas por los mismos partidos.

Y movilidad sostenible ”pura”, es sin duda el transporte ferroviario, en el que tras gastar una fortuna en la adecuación, mejora y soterramiento, que nos llevarían al ferrocarril del siglo XXI , continuamos con las mismas frecuencias del siglo pasado.

Creo, sin temor a equivocarme, que el famoso “cierre del anillo circulatorio”, también conocido como el vial Urki-Hegoalde, algo tiene que ver con la movilidad sostenible de Durango, pero su ejecución ha transitado por los acuerdos, los pactos y las promesas, durante largos años, para traducirse en un troceado de fases con las que no se vislumbra un final.

También creo, no estoy seguro, que la OTA, y su actual diseño en Durango tiene mucho que ver con la movilidad sostenible, sobre todo en los barrios en los que no está implantada, y sufren de una saturación de vehículos, sin una plaza de aparcamiento libre, y con un continuo ir y venir de coches por sus calles, a la búsqueda de esa, “posible plaza de aparcamiento que quizás alguien deje libre justo al pasar”. Si no me creen pregunten a los ciudadanos de segunda que viven en ellos. Aclaro que “de segunda” es como les califica la actual distribución de la OTA.

Hay más, un plan ciclable, una intermodalidad de los transportes público-privado, avanzar en la peatonalización de algunas calles, y más, pero esto es para tratarlo con seriedad y dedicación, echándole tiempo, ganas y transmitiendo a la ciudadanía, por ejemplo en estas semanas de la movilidad sostenible, cuáles son los proyectos, cómo se van a ejecutar y hacerles participes, porque a fin de cuentas la movilidad somos todos, sea esta sostenible o insostenible.

Quizá porque entiendo que la movilidad sostenible es un tema muy importante y muy serio, no me parece que dar una vuelta en bici, un maratón de spining, un concurso artístico o cómo hacer pan rallado dando pedales, sea  la forma de participar en la Semana Europea. Que, además, nos vamos a registrar en un listado de ciudades participantes.

Alberto Uriguen