¿Igualdad? ¿De verdad? No

Sra. Díaz,aboga por qué se pueda conciliar con la posibilidad de llevar a lxs hijxs al trabajo pero el ejemplo que pone lo tacha de teatrero,dá ud un montón de soluciones que en el siguiente párrafo las deja sin valided dejándolas al margen ya que a descubierto la solución a todos los males sin necesidad de que se lo diga nadie,”la corresponsabilidad”, un largo camino que recorrer dice.Si los que ha expuesto en los dos párrafos anteriores son más cortos y de más fácil tránsito!!es más yo diría que cercanos y familiares.
Sus correligionarios, que tienen las riendas para la solución de esos problemas ya que igual que unilateralmente deciden,por tener una mayoría pactada,subir el precio por el uso de una infraestructura también pueden tomar otras decisiones que solucionen lo que ud plantea,pero no quedaría bonito verdad?y podrían acusarle de saltarse las directrices y eso da mala imagen.
Igual que querer destacar en algo que por las fechas que son queda bien hablar de ello y con mucho palabrerío se difumina en el limbo.Su partido,el que tiene las riendas de todas esas políticas, es a quien tiene que dar lecciones y no a nadie más,pero para eso hay que tener algo más que sobervia y no es otra cosa más que ganas y menos lalala y más bajar al barro a mancharse las panama.
Y a los medios, y más los dirigidos por mujeres y siendo como somos,yo el primero,partidarixs del lenguaje inclusivo,”los saboteadores”decirles que no es lo mismo y ofende igual a los sexos que “lxs saboteadorxs”.Que para algunas cosas somos más mamistas que la mama.

Es cierto Angel, lo que si viene a cuento es tu critica sin argumento. Pero claro, cuando no se tienen se obta por la descalificación. El artículo no dice nada por lo que no llevemos tiempo luchando muchos padres y madres. Mejor que le diga a los empresarios porque muchos no contratan a hombres que han decidido cuidar de sus hijxs, de la misma manera que lo hacen con las mujeres en edad de querer tener familia. O que me cuente que hace su partido por la conciliación familiar o la reinserción en el mercado laboral, después de elegir el cuidado de tus hijos por encima de tu carrera profesional. Un último consejo, este domingo podrás ver en “Salvados” en la sexta de que estoy hablando, y que otras políticas son posibles.

Bien dicho, Angel. A cuento. Al cuento con el que nos obsequia ésta señora.

Respuesta a las dos preguntas:
1. Porque ustedes las mujeres no quieren. La culpa es suya y del sistema. Y a la cabeza de ese sistema están los políticos y políticas de su partido, entre otros.
2. Porque ustedes las mujeres no quieren. La culpa es suya y del sistema. Y a la cabeza de este sistema están los políticos y las políticas de su partido, entre otros.
Conclusión: Como en un campo de tenis, le devolvemos la pelota a su campo ( a su Batzoki, a la sede del Euskadi Buru Batzar, o al Gobierno de la CAPV).

¿Por qué los hombres no llevan a su hijo al puesto de trabajo? porque son del PNV y así se lo han hecho saber a su compañera, porque en el resto de partidos somos muchos los padres qeu nos llevamos a nuestros hijos al puesto de trabajo. ¿por qué el hombre no se reduce su jornada laboral? porque es del PNV, porque otros sí lo hacemos. Lo que usted sí puede hacer si es madre o va a serlo es ponerle primero su apellido… ya lo sabes, le animo a hacerlo.
Cuando usted escribe o las del PE (antes PSOE o PSE) ya sabemos qué van a escribir. Escribir saben, pero dar pasos con sus respectivos partidos no… Le dejo que tengo que llevar a mis hijos al colegio: por cierto no me cruzo con muchos del PNV. Háblenlo en sus asambleas, perdón, reuniones…