La carretera de Oka habilita una zona con merenderos junto a una nueva ruta peatonal y ciclable

Los ayuntamientos de Berriz y de Mallabia han finalizado las obras realizadas en la antigua carretera de Oka, que transcurre desde el cruce de Lariz y la ermita de Zengotita. Con un coste de 367.000 euros sufragados por la Diputación, la vía estrena nuevas zonas de esparcimiento, una ruta ciclable y peatonal, y aparcamientos.

Se trata de la antigua carretera BI-3340, con una longitud de aproximadamente 1,5 km, que quedó en desuso cuando se ejecutó la actual BI-633 a su paso por Trabakua. “El estado de conservación de este tramo, sobre todo en algunos puntos, era intransitable en condiciones de seguridad. Por ello las administraciones de Berriz y de Mallabia decidimos solicitar su cesión a la Diputación para recuperar dicha vía y convertirla preferentemente en ciclable y peatonal”, ha explicado el alcalde berriztarra Roland Isoird.

En las actuaciones se ha realizado la limpieza de la calzada, se ha subsanado el riesgo de taludes y se ha colocado la señalización de itinerario para peatones y bicicletas. Además, se han acondicionado aparcamientos en diferentes tramos de la carretera y se han creado nuevas zonas de esparcimiento con merenderos, miradores y bancos.

“El objetivo de estos trabajos ha sido poder crear una nueva ruta con todas las garantías de seguridad y que pueda ser también una nueva zona de esparcimiento y una oportunidad de contemplar las maravillosas vistas de nuestro entorno”, ha añadido. El mirador se ha ubicado estratégicamente en una zona que actualmente se encuentra franqueada con pinos. Para despejarla, se está manteniendo conversaciones con los propietarios de los terrenos adyacentes “para adquirirlos, eliminar los pinos existentes y avanzar en la recuperación paisajística del entorno con nuevas plantaciones de arbolado autóctono”, ha comentado Isoird.

Patrimonio natural

Por su parte, el alcalde de Mallabia, Igor Agirre, ha subrayado que “esta actuación forma parte del proyecto de recuperación del patrimonio natural, tal y como hemos hecho recientemente con la ruta de las cascadas. En este caso además conseguimos una vía que impulsa una nueva forma de movilidad sostenible”.

En el aspecto económico, la obra ha sido ejecutada con un coste final de 367.022,44 euros (IVA incluido) que ha sido sufragado en su totalidad por la Diputación Foral de Bizkaia. La redacción del proyecto de ejecución, la dirección de obra y los trabajos técnicos complementarios, con un importe de 20.545,80 euros, ha sido asumido por el Ayuntamiento de Berriz en un 76% y por el de Mallabia en un 24%.

En la actualidad se está estudiando, en colaboración con la entidad foral, completar el enlace peatonal desde la ermita de San Lorenzo al cruce de Lariz y una pasarela peatonal y ciclable que permita cruzar la BI-633 desde ese mismo punto de forma segura y comunicar el entorno con la carretera vecinal Besoita-Andikoa.