El primer tren que circulará con pasajeros por el subsuelo de la villa lo hará el lunes

17 de diciembre. Es la fecha en la que el soterramiento del tren será una realidad en Durango después de tantos años de espera. Como paso previo a la inauguración, y a modo de prueba, responsables de Euskal Trenbide Sarea (ETS) y periodistas subirán el lunes al primer tren con pasajeros que cruzará la villa por el subsuelo.

Aunque la obra civil del soterramiento no ha concluido aún –los trabajos continuarán hasta abril como mínimo-, los trenes se harán invisibles en Durango a partir del próximo 17 de diciembre. Al menos, las unidades que ofrecen el servicio ferroviario regular ya que, mientras los talleres y cocheras de EuskoTren no se trasladen definitivamente al barrio abadiñarra de Lebario, seguirán pasando algunos convoys por las vías que están en la superficie.

Han tenido que pasar 7 años para que este proyecto, la inversión ferroviaria más elevada que se ha acometido en Euskadi, llegue a su fin. Las obras comenzaron en marzo de 2005 con un plazo de ejecución de 60 meses y un presupuesto de 160 millones de euros. Pero los trabajos han tardado dos años y medio más lo previsto, y la inversión final rondará los 220 euros.

Estación de Zaha Hadid

La puesta en marcha del servicio lleva aparejada otra buena noticia: la inauguración de la estación. Diseñada por la prestigiosa arquitecta Zaha Hadid, se trata de un proyecto que a buen seguro ejercerá de polo de atracción para muchos visitantes.

Lo que aún queda por decidir es a qué se destinarán los 60.000 metros cuadrados que se liberarán en esa zona como consecuencia del soterramiento del tren y el traslado de los talleres y las cocheras. Debido a su elevado coste, el Gobierno vasco de Patxi López descartó construir una nueva sede de EuskoTren en Durango –había sido adjudicada también a Zaha Hadid- y tampoco se volvió a hablar de las cinco vanguardistas torres de viviendas que iban a edificarse en la zona.

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