La plataforma Goi Tentsioari EZ, contra la proyectada línea de alta tensión Güeñes-Itsaso que atravesará Durangaldea, celebró ayer una jornada reivindicativa durante las fiestas zornotzarras de Belatxikieta.
Los convocantes de la protesta aprovecharon la celebración de San Ignacio para reiterar su oposición a la llamada “autopista eléctrica”. La línea atravesará 17 municipios vizcaínos, de los cuales seis pertenecen a Durangaldea. Entre ellos, se encuentra Amorebieta, a la que afectará durante 6,8 kilómetros.
Tras permanecer seis años paralizado por las alegaciones presentadas por ayuntamientos y particulares, el proyecto se reactivó en 2017. Ante la noticia, la coordinadora contra esta infraestructura retomó sus movilizaciones aduciendo las consecuencias que puede tener contra la salud y el medio ambiente y su “inutilidad”, ya que en la actualidad “el 92% de la energía consumida en Euskal Herria es importada, por lo que la interconectividad que dicen necesitar ya está construida”.