Verano muy poco azul

Acostumbra el verano en ser parco en noticias de relevancia. El papel cuché invade las redacciones y las ediciones, y la playa, los chiringuitos y las cervezas contribuyen a relajar cuerpos, mentes y espíritus críticos.

No obstante, durante estos días, la actualidad amenaza con tornarse seria, muy seria y trascendente. Y no sólo porque la deuda pública de algunos estados de la eurozona aguantan, como pueden, los embates de las agencias de rating, tres de las cuales, (Standard & Poor´s, Moody´s y Fitch), que acaparan el 90% de la cuota de mercado mundial, han visto como se ha interpuesto, como consecuencia de sus calificaciones, querellas contra ellas ante la Audiencia Nacional. O porque se termina de perfilar el nuevo rescate financiero de Grecia. También porque la tasa de desempleo sigue por las nubes.

Debemos sumar a ello a los cargos públicos en apuros. Tenemos a todo un Premier como David Cameron, contra las cuerdas por los vínculos que mantenía con directivos de News Corporation, compañía propiedad del hasta hace poco idolatrado magnate Rupert Murdoch, y vórtice del escándalo de las escuchas ilegales que afectan a prensa, políticos y policía británicos.

Junto a él, el irrepetible Francisco Camps, que ante las presiones de los dirigentes de su propio partido político, y pese a la muchedumbre de votantes que reiterada y habitualmente lo apoya y jalea, ha dimitido de su cargo de presidente de la Generalitat de la Comunidad Valenciana, y todo, por haber aceptado como presente tres trajes de nada. Claro que la crisis política que ello ha de suponer, poco significaría ante la dimensión que podría llegar a adquirir durante los próximos meses, la conocida como “Trama Gürtel”.

Claro que incluso otro ex, exministro de Interior, y actual flamante candidato del PSOE a la presidencia, Alfredo Pérez Rubalcaba, tiene que ver cómo los miembros del PP, con la que les está cayendo, aprovechan para convertir en dardos las plumas que va dejando el “Caso Faisán”, y piden, insistentemente que se aplique la receta de Camps y abandone, imagino que no su cargo, porque ya cesó en el mismo, sino, supongo, que su carrera política.

Definitivamente, vivimos un inicio de verano atípico. Un verano muy poco azul. Lluvia, grises nubarrones y temperaturas muy suaves en lo climatológico, y una candente, roja, actualidad.  

Jon Andoni Bengoetxea es abogado y presidente de la Cultural de Durango