De atajos y tempestades

Lo que está ocurriendo después de las elecciones generales del 20-N resulta apasionante, no tanto por la vertiente política del asunto, como porque supone un momento inmejorable para observar los comportamientos humanos.

En lo político, opino que cualquier pacto que surja resultará  de todo menos bueno. Un gobierno de continuidad ya sabemos lo que es. Y cualquier opción de cambio se dará de bruces con la ???troika???, que es quien verdaderamente manda en Europa. Baste recordar lo que ocurrió en Grecia con Syriza. Veo, entonces, que la única alternativa es la revolución, pero me parece que no estamos por la labor. Los poderes fácticos trabajan de modo eficiente para entretenernos con quimeras, alejándonos de nuestros verdaderos intereses vitales, y apenas hay nada que los contrarreste. Si no nos atrevemos a romper las reglas, pero a romperlas radicalmente, me temo que no hay más remedio que respetar primero las existentes antes de cambiarlas.

De modo que pocas sorpresas en la vertiente política, pero muchas en los talantes. Pienso en Pedro Sánchez y su extraño comportamiento, tanto hacia su propio partido con el que mantiene abiertas discrepancias, como con el presidente del gobierno en funciones, con quien dice éste que se niega a hablar. Pero me estoy refiriendo, sobre todo, a Pablo Iglesias, quien en otro alarde de protagonismo acaba de plantear la configuración de todo el gobierno, no sé si con secretarías de Estado incluidas. Evidentemente, le ha hecho un feo al líder socialista, que es quien se supone que tendría que llevar la voz cantante en este terreno.

Leo en la prensa madrileña que Podemos se plantea una estrategia de ???ganar-ganar???, de la que derivaría esta propuesta. Si esta expresión, “ganar-ganar”, ha salido del ???partido del cambio??? para explicar que, poniendo contra las cuerdas a la persona con la que pretenden pactar, Podemos sólo puede ganar deduzco que en esta formación desconocen el significado de ???ganar-ganar???, aparte de ignorar las más elementales reglas de conducta social.

Cualquier curso básico de negociación explica en su primera lección que un pacto exitoso requiere que todas las partes ganen.  Eso es ???ganar-ganar??? y lo que ha protagonizado Pablo Iglesias estos últimos días es el mejor ejemplo de ???ganar-perder??? que hemos visto en estas semanas.

Quizás al líder de Podemos le falte experiencia, quizás le gusten demasiado los atajos. Tal vez no se haya dado cuenta de que las leyes humanas fallan, pero las de la naturaleza suelen ser implacables. La sabiduría popular refleja así la ley de causa-efecto: ???Quien siembra vientos recoge tempestades???. En cuanto al conejo que se ha sacado de la chistera, viene al pelo esta frase atribuida a Buda: ???La vida es una carrera de obstáculos, en la que no existen atajos???

Mertxe Arratibel es periodista en andra.eus