“No sé qué hemos hecho para que todo el mundo quiera que nos peguemos”

Entre los dos atesoran una buena colección de títulos vascos y nacionales. Juntos, han forjado la historia de las artes marciales en Durangaldea. Y, tras muchos años retirados, Laureano Lara y Jimi Rojas regresarán a un ring el próximo 21 de febrero en el frontón de Durango, protagonizando el combate principal de una velada organizada por Durango Street KO.

La iniciativa ha salido adelante gracias al empeño de varios amantes de este deporte, como Christian Barreira, que promete “un evento inolvidable, que ya cuenta con una respuesta del público increíble. Hemos vendido dos tercios de las entradas cuando faltan más de 20 días para el evento y no creo que llegue ninguna a taquilla”. Entre los combates programados destacan los dos asaltos de kickboxing que medirán a Lara y Rojas, ahora dedicados a la formación de otros luchadores.

El primero nació en Valdepeñas en 1963, pero desde los dos años reside en Berriz. Tres veces campeón de España, cuatro de Euskadi y subcampeón de Europa, domina a la perfección el kárate y el fullcontact. El eibarrés Jimi Rojas (1966) vivió más de dos décadas en Durango, tiempo durante el que logró cinco títulos vascos en ambas disciplinas.

-¿Cuándo os iniciáis en las artes marciales?
-Laureano: Empecé con unos 12 años. Los amigos del colegio empezaban a apuntarse a deportes y yo escogí el kárate. Al principio tomaba clases en Durango y luego fui a Bilbao a practicar boxeo y full contact. La verdad es que me he movido bastante y para los 17 ya combatía en Europa.
-Jimi: Yo también comencé muy joven, animado por mi admiración por Bruce Lee. Entonces no tenías muchas más opciones que el kárate y el judo. Con el tiempo fui probando otras disciplinas, como el jiu-jitsu o el wing tsung.

-¿Cómo ha cambiado ese mundo en todo este tiempo?
-L: Ahora, quien quiera practicar artes marciales tiene muchas más facilidades, con una enorme oferta a su alcance y cerca de casa. Nosotros teníamos que ir a otros países a formarnos, pagando el desplazamiento y la estancia de nuestro bolsillo, claro.
-J: Eso sin contar que ahora tienen acceso a todo a través de Internet. Aunque nunca pueda ser equiparable verlo en una pantalla a vivirlo en primera persona.

-Tras muchos años compitiendo y consiguiendo importantes triunfos, optáis por dejarlo. ¿Cuál fue el motivo?
-J: En mi caso, me rompí la nariz en el 92 y el médico que me operó me aconsejó que abandonara la competición por un tiempo. Pero ahí me quedé.
-L: Yo he tenido una carrera muy larga y dura, hasta los 37 años, y consideré que ya era edad para pasar página.

¿Y qué os ha animado a volver?
-J: Sin duda, volver a sentir otra vez la emoción de estar en un cuadrilátero. Y tener la oportunidad de enfrentarme a un amigo como Laureano. Intentaremos dar un bonito espectáculo que haga disfrutar a la gente.
-L: La verdad es que yo paso mucha envidia cuando veo pelear a los chavales que entreno. Siempre añoras revivir la sensación de estar en el ring y creo que aún me queda algún cartucho que gastar. En cuanto me lo propuso Christian me pareció genial.

“Me he preparado a conciencia”

-¿Cómo habéis preparado el combate?
-L: Reconozco que me he entrenado muy a conciencia, porque sé que me enfrento a una persona muy dura, a la que conozco bien porque fue alumno mío y al que me une una gran amistad desde hace muchos.
-J: Yo estoy operado de la rodilla y el menisco de la pierna izquierda, lo que me impide correr mucho. Pero me he dedicado a andar en bici y hacer piscina.

-¿Cuáles son los puntos fuertes de vuestro contrincante?
-J: El punto fuerte de Laureano es el cuerpo a cuerpo. Intentaré mantenerle a distancia.
-L: Jimi es, ante todo, un gran artista marcial y buena persona. Y en el ring, un luchador muy duro. Todavía no sé qué estrategia voy a seguir. Iré improvisando a lo largo del combate.

-¿Esperabais tanta expectación?
-J: Estaba seguro de que se iba a interesar mucha gente, pero no hasta este nivel. Me paran constantemente por la calle encargándome entradas, que se están vendiendo a muy buen ritmo.
-L: A mí me han dicho que van a venir varios autobuses desde Berriz para ver el combate. No sé qué hemos hecho para que todo el mundo quiera que nos peguemos, ja, ja, ja.

-Seguís ligados al deporte formando a otros luchadores. ¿Qué es importante transmitir, además de las propias técnicas de lucha?
-L: Llevo tres clubs de niños y uno de adultos, en los que intento introducirles la importancia de la disciplina, sobre todo a los más pequeños. Gracias a ella lograrán desarrollarse como artistas marciales y como personas. Y también, busco que aprendan a respetar a los demás.
-J: Yo ahora sólo doy clases a adultos, con los críos me volvía loco, ja, ja, ja. Para mí lo importante es que los practicantes se sientan seguros de sí mismos y concienciarles para ser buenas personas. Que no se sientan con derecho a pegar a cualquiera sólo porque dominan las técnicas adecuadas.