El Pleno de Durango modifica el PERI del ferrocarril para evitar la construcción de una iglesia

El Plan Especial de Reforma Interior del Ferrocarril (PERI) de Durango o, lo que es lo mismo, los alrededor de 60.000 metros cuadrados que se van a liberar con el traslado de los talleres y cocheras a Lebario, será modificado parcialmente tras aprobarse esta tarde una moción de Bildu y Aralar que ha sido respaldada por el PSE-EE. El objetivo de esta iniciativa no es otro que evitar la reserva de suelo que se realizó en 2006 para que se pudiera construir otra iglesia católica en la localidad.

El PERI del ferrocarril fue aprobado inicialmente en sesión plenaria en febrero de 2003. En el período de información pública, el Obispado de Bilbao solicitó que se incluyera en la ordenación una finca para uso religioso con el fin “de crear una nueva parroquia de la Iglesia Católica” que conllevaría la reserva de 1.000 metros cuadrados de suelo público. La propuesta salió adelante con los votos del PNV y la abstención del PP.

Más de diez años después, el Pleno de Durango ha decidido dar marcha atrás y anular una cesión que se formalizó en 2006, con la aprobación definitiva del PERI del ferrocarril. El acuerdo ha salido adelante con los votos favorables de Bildu, PSE-EE y Aralar. El PNV se ha abstenido y el PP lo ha rechazado.

La moción ha sido defendida por el portavoz de Aralar, Dani Maeztu, quien ha subrayado que “no tiene sentido” que se priorice la reserva de esos terrenos para fines religiosos primando “el interés privado por encima del público”. En este mismo sentido, el parlamentario de EH Bildu ha querido recordar que Durango tiene a día de hoy “bastantes necesidades” de equipamiento cultural, juvenil y de vivienda, mientras que el Obispado cuenta con un buen número de propiedades, algunas de las cuales, como los conventos de Santa Susana y las Salesas, “se encuentran vacías”.

Moción “extemporánea”

Desde el PP, Juanjo Gastañazatorre ha tildado la moción de “extemporánea” a la vista de que “se nos ha dado hace menos de una semana la posibilidad de proponer iniciativas” para desarrollar en estos terrenos cuando se derriben las cocheras y los talleres de EuskoTren. El edil popular ha hecho mención después a que es un acuerdo “en el que no tiene que ver nada el Ayuntamiento”, al haber sido suscrito por el Obispado y el Gobierno vasco, aunque los representantes de varios grupos han matizado posteriormente que la competencia es municipal.

La filosofía de la moción también ha sido compartida por la portavoz del PSE-EE: “Ya dijimos en su día que no nos parecía bien priorizar actividades privadas en un espacio público y menos, cuando el municipio no tiene suficientemente cubiertas sus necesidades”, ha aclarado Pilar Ríos. Aun así, la edil socialista ha solicitado que el debate se trasladara a la comisión de Urbanismo para analizar las posibilidades con más calma “y tratar de alcanzar el mayor consenso político posible”.

“No somos portavoces de la Iglesia”

Jon Bingen Landabidea ha hecho referencia a la petición de Ríos al recordar que la moción ya insta a fomentar un debate en comisión “para determinar el uso” más conveniente para esa parcela. A continuación, el edil de Bildu ha vuelto a reclamar al PNV la puesta en marcha de procesos participativos. “Este Equipo de Gobierno ha tomado ya demasiadas decisiones en nombre de la ciudadanía”, ha remarcado en alusión al acuerdo alcanzado con el Obispado años atrás.

Como respuesta a este último comentario y a otros en el mismo sentido que se han vertido durante la sesión, Goiztidi Díaz ha querido dejar claro que su grupo “no es portavoz de la Iglesia católica”. La teniente de alcalde jeltzale también se ha mostrado favorable a trasladar la propuesta a comisión de Urbanismo para poder llevar a cabo allí un debate “más profundo y participativo”.

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