Donación a Enrike Huerta

El malacólogo Enrike Huerta recibió hace unos días una espectacular donación en el transcurso de la charla organizada por Astarloa Kultur Taldea que ofreció en el Batzoki de Durango. El también durangués Javier García Albizu le hizo entrega del hocico largo y lleno de dientes de un pez sierra ante el asombro de los presentes.

La ‘sierra’ del pez, perteneciente a la especie ‘Pristis pectinata Latham’ y de una longitud que alcanza casi el metro y medio, fue entregada por Javier García como donación al Hontza Museoa que Huerta abrirá en unos meses en su ubicación definitiva de Mañaria.

Según el relato de Amaia Aberasturi, el experto explicó a los asistentes a la charla que un pez con ese hocico debió tener una longitud corporal aproximada de 5 metros, “sin contar la sierra”.

Este hocico es, precisamente, la característica más sobresaliente del pez sierra. Éste se encuentra cubierto con poros sensibles al movimiento y a la electricidad que les permite detectar el movimiento e incluso los latidos cardíacos de presas enterradas en el sedimento marino. El hocico actúa como un detector mientras nada sobre el fondo marino en busca de alimento y como herramienta excavadora para desenterrar crustáceos.

A pesar de su apariencia, son peces que no atacan a las personas a menos que sean provocados o sorprendidos. Son animales ovovivíparos. Una hembra puede llegar a dar a luz entre 15 y 20 crías cada vez.