‘Storm’, la tormenta que se escucha después de la marea

Carlos Núñez ‘Abu’ está convencido de que Ekaitz estará sentado a su lado sobre el escenario del Plateruena cuando suenen los primeros acordes de ‘Storm’. El batería de Zebel actúa esta noche junto a su grupo, Guda Dantza y Hora Trece en un concierto solidario que recaudará fondos para la Marea naranja y que busca concienciar sobre la importancia de donar médula. 

‘Storm’ es lo que queda cuando hasta la música pasa a un segundo plano. La marea. La calma que se hace hueco tras la tormenta. ‘Storm’ es un himno a la esperanza.

‘Abu’ compuso la canción en verano de 2014. Ekaitz, su sobrino, estaba siendo tratado en Madrid de una leucemia pero los pronósticos eran tranquilizadores y empezaban a ver la luz al final del túnel. “Aunque dedicada a Ekaitz y a todos los niños que estaban peleando como él, en realidad era un regalo para Susana e Iñaki. Llevábamos dos años muy duros, pero en aquellos momentos todas las señales eran positivas y quería que tuvieran la canción para cuando todo pasara”.

Por eso ‘Storm’ habla de sueños y esperanzas. De dragones y mazmorras. De pequeños grandes hombres que se atreven a volar alto. 

500.000 lágrimas

A Ekaitz le encantó la canción que lleva su nombre en inglés. Osaba ‘Abu’ e izeko Libe, los mismos que le habían regalado la batería que tanto le gustaba hacer sonar, viajaron a Madrid para estar con él y se la cantaron antes de recibir el peor diagnóstico. 

Un mes después de la muerte de Ekaitz, Zebel grabó la canción en Lorentzo Records a modo de homenaje. Izeko ‘Libe’  también quiso contribuir y se encargó del montaje del videoclip. “Hemos derramado 500.000 lágrimas y dibujado 500.000 sonrisas en nuestra cara haciéndolo”, reconoce Libe Laraudogoitia en el texto que acompaña al vídeo en youtube.

El concierto de esta noche tampoco va a ser fácil para ‘Abu’. “Sé que Ekaitztxu va a estar tocando conmigo, como cuando mi hijo Liher y él me acompañaban al local y disfrutaban como locos aporreando la batería”. De hecho, el niño es uno más dentro de Zebel a través de ‘Simba’. El que era su muñeco preferido lleva meses ocupando un lugar preferente en la batería de su tío.

35.000 euros

Problemas de agenda impidieron que el festival pudiera organizarse en marzo, coincidiendo con el multitudinario Maratón Solidario contra la leucemia que se celebró Durango. Una iniciativa que surgió sin hacer demasiado ruido de un grupo de padres y madres unidos por esta enfermedad, ‘La cuadri del hospi’, y que en cuestión de meses se ha transformado en un auténtico tsunami naranja.

“Cerrar el proyecto no va a ser tan fácil porque las muestras solidaridad que nos llegan de infinidad de lugares siguen siendo impresionantes. Además”, explica Susana Del Amo, la madre de Ekaitz, “tampoco nos gustaría que fuera algo que arrasó en un momento concreto y luego desapareciera”. 

Susana y sus amigos de ‘La cuadri del hospi’ no dan abasto desde el nacimiento de la Marea Naranja. Les requieren de aquí y de allá para que hablen de donación de médula y de sus vivencias personales. “¡Es impresionante, exagerado! “, proclama, eternamente agradecida a las miles de personas anónimas que han aportado los 35.000 euros con los que se han conseguido financiar dos proyectos de investigación dirigidos por BioCruces en la lucha contra el cáncer.

A esta cantidad, que multiplicó por cinco el objetivo que se habían marcado, quieren añadir ahora otros 11.000 euros. Son los que se necesitan para sufragar un estudio sobre los efectos secundarios de la radioterapia en tumores cerebrales y algunas leucemias. 

La importancia de donar

Parte del dinero, unos 6.300 euros, ya se logró hace unos días con una ‘mendi martxa’ en Basauri y esperan recaudar el resto con el concierto de esta noche y el campeonato de pádel solidario que también se celebra en Durango en estos días.

“Es un poso que estamos dejando. Paso a paso, sin prisas, pero seguros de que merece la pena porque nos consta que hay mucha gente que se ha hecho donante ya”, reflexiona Susana.

Compañeros de colegio de Ekaitz, amigos y grupos de música -entre ellos Gatibu- insistirán esta noche en esa misma idea en los vídeos que se proyectarán durante el concierto. ‘Abu’ lo tiene claro: “Hay que concienciar a la gente de que un simple pinchazo puede salvar vidas y de que no hay nada más importante que la salud”.

Por eso ‘Storm’ canta a los sueños inquebrantables. Es lo que queda cuando hasta la música pasa a un segundo plano. 

(Foto: los integrantes de Zebel, en los estudios de Lorentzo Records, durante la grabación de ‘Storm’)