El Tabirako se acerca al liderato tras ganar al Artieda

El Tabirako se sitúa en el segundo lugar de la tabla tras doblegar al Autocares Artieda por un resultado de 70 a 78. Los durangarras llegaban a Pamplona con el objetivo de no desprenderse del grupo que encabeza la clasificación. No obstante el partido fue complicado, en el que el equipo no llegó a compenetrarse del todo bien y en el que la calidad individual de varios jugadores permitió solventar el encuentro sin excesivas complicaciones.

Partido correspondiente a la decimotercera jornada de liga que enfrentaba a dos equipos colocados en posiciones muy diferentes en la tabla. El Tabirako Baqué, segundo en la tabla mientras que el Autocares Artieda, situado en decimoquinto lugar, afrontaba el choque con el objetivo de salir de los puestos comprometidos.

Los cafeteros debían solventar a priori el encuentro sin problemas ya que han demostrado durante distintas fases de la temporada que son capaces de sobreponerse a las bajas de sus jugadores.  Aún así, quedaron patentes varios fallos colectivos e individuales que deben corregirse urgentemente durante la semana para que no se vuelvan a repetir en los próximos partidos.

Empezaba el partido con un Tabirako Baqué gris, que sin llegar a jugar del todo mal, tampoco conseguía encontrar su sitio en el partido, sucumbiendo así al ritmo que imponían los pamploneses en los primeros compases del choque.

Acierto de Mikel Agirre

Por su parte, los de San Cernín, pese a su  desventaja en lo que a la altura se refiere, conseguían poner contra las cuerdas a los pivots durangueses, que no eran capaces de mostrar su mejor versión.

El acierto de Larra, pero sobre todo el de Oinatz, permitían al Tabirako gozar de una ventaja relativamente cómoda. Pese a todo, dicha ventaja se veía reducida a un punto al término del segundo cuarto debido a varios despistes visitantes y al acierto de los locales desde la línea de tres.

En la segunda parte del partido, el Tabirako Baqué salía al campo con un notorio cambio de actitud, lo que sumado al mayor acierto de todos sus jugadores y especialmente el de Mikel Agirre, permitía a los durangueses despegarse en el marcador y conseguir una renta de hasta veinte puntos.

Finalmente, el partido acababa con 70-78 en el luminoso, puesto que la relajación que nunca debe aparecer, y varios fallos absurdos de los cafeteros en los últimos minutos del choque, reducían la ventaja visitante a ocho puntos.

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