“La gente no se quiere acercar mucho a los puestos para evitar tentaciones”

La Euskal Denda de Durango afronta su recta final con más curiosos que compradores. La de ayer fue una jornada “exitosa” en lo que se refiere a asistencia de público, ya que registró una cifra récord de 6.000 personas que visitaron los 66 stands de artesanos vascos y media docena de gallegos. La cita que se ha convertido en un referente en el mundo de la artesanía ha contabilizado hasta el momento más de 13.000 visitantes.

No obstante, según la asociación Arbaso organizadora de la feria, la tan mencionada crisis se ha dejado notar también este año en las ventas del sector. “Notas que la gente no se quiere acercar mucho a los stands para evitar tentaciones”, reconoce Bernat Vidal desde Arbaso.

La feria que arrancó el sábado cerrará mañana sus puertas con una acogida que según Vidal, “poco a poco ha ido incrementándose en número”. A pesar de ello, algunos de los artesanos que exponen sus trabajos en la plaza del mercado coinciden en que las ventas se han resentido esta edición.

“La Euskal Denda es un buen escaparate para darnos a conocer y es importante estar aquí”, resumía Maria Jesús Kortabitarte de los trajes tradicionales Jaialdi de Amorebieta.

El lema de esta 16 edición “Nire tailerra, nire ogibidea, nire bizimodua” (Mi taller, mi trabajo, mi forma de vida), ha permitido visibilizar el trabajo de los artesanos en vivo y en directo, generando especial atención las demostraciones de vidrio soplado, la talla de madera y la alfarería. 

DURANGON. Noticias de Durango