“Es en el estudio donde te das cuenta de tus limitaciones”

El grupo de rock zornotzarra Blanco y en Botella ha publicado su primer álbum. Seis canciones compuestas por Oier Sacristán (batería), Julen Alberdi (bajo), Unai Sulibarria (guitarra) y Haritz Mirandona (guitarra y voz). Grabado “con cariño y cuidando mucho los detalles” en el estudio zornotzarra La Higuera, han contado con la ayuda del ‘memoria de pez’ Aitor Lacalle.

Blanco y en Botella arrancó su andadura como grupo de versiones pero, gracias a las horas de ensayos en el Centro Zelaieta, han podido componer sus propias canciones. Incluso dedicarle una de ellas a Iñaki, la persona que les abre la puerta de estos locales.

-¿Cómo cogió forma el grupo?
-Salió sin planearlo mucho hace cuatro años. Todos somos de la misma cuadrilla y empezamos a tocar un instrumento diferente cada uno. Al ver que todos teníamos los mismos gustos musicales fue cuando se nos ocurrió la idea y montamos el grupo.

-En esa época rondaríais los 18 años. ¿Cómo empezasteis a moveros?
-Tenemos la suerte de poder ensayar en los locales del Zelaieta. Allí tenemos una batería, micros y un equipo de sonido. Hay algo de material que se podría renovar pero lo que menos nos gusta es que la gente que acude maltrate el material. Es algo de todos y deberían cuidarlo más.

-¿Os planteáis la música como vuestra profesión?
-A día de hoy es un hobby y mantendremos el grupo hasta que nos aburramos o no podamos seguir quedando. Nuestro objetivo no es vivir de esto, pero si en un futuro nos fuese bien, habría que verlo porque ¿a quién no le gustaría vivir de lo que le gusta? De todas formas, por si acaso, tenemos un plan “b”.

-Vuestro primer trabajo vio la luz a finales de marzo. Llama la atención que las seis canciones sean en castellano.
-Las canciones son en castellano porque es el idioma en el que cantamos desde un primer momento, pero la idea es ampliar el repertorio con canciones en euskera.

-¿Quién ha escrito las canciones?
-Todos hemos aportado letras y también la parte musical. Cada uno la ha ido trabajando en casa.

-¿Qué canción es la que más está llegando a la gente?
-La que más está gustando es ‘Nada más’.

-Uno de los temas se titula Iñaki, ¿va dirigida a alguien en especial?
-Sí, Iñaki es el que nos abre las puertas de los locales de ensayo del Zelaieta. La canción empezó un poco en broma, pero nos quedó bien y decidimos incluirla en el disco.

Teloneros

-¿Cómo surgió la idea de grabar el disco?
-Hace dos años, en fiestas de Amorebieta, fuimos los teloneros de Memoria de Pez. Al acabar el concierto Aitor Lacalle nos comentó la posibilidad de grabar un disco en un estudio que él estaba montando. Y cuando nos decidimos, fuimos donde él.

-¿Qué os ha aportado Aitor Lacalle en la grabación?
-Matices que nosotros no oímos, cosas que creíamos que estaban bien y él nos las ha corregido. La verdad es que nos ha ayudado mucho a la hora de grabar.

-¿Cómo fue la experiencia de grabar en un estudio?
-Da respeto porque tienes que dar el callo. No vale confundirse porque si no tienes que volver a empezar, tardas más tiempo, y al final se hace largo. Antes de empezar a grabar pensábamos que sería más fácil. Es en el estudio donde te das cuenta de tus limitaciones.

-¿Dónde se puede conseguir vuestro disco?
-Está en Spotify y también se puede comprar en los bares Guria y Luxury. Otra forma de conseguirlo es a través de nuestro Facebook.

-¿De dónde surgió el nombre del grupo?
-No sabemos muy bien. Tuvimos que poner rápido un nombre para un concierto y salió ese.

-Antes os dedicabais a las versiones, ¿quiénes son vuestros referentes?
-A los que más hemos versionado es a Fito, Platero y ZZ Top.

-¿Recordáis cómo fue vuestro primer concierto?
-Fue en el Zelaieta y montamos bastante cristo. Estábamos bastante nerviosos y no clavábamos bien el final de las canciones. En el que mejor nos lo pasamos fue en fiestas de Amorebieta, utilizando el equipo de Memoria de Pez. Fue una pasada.

-¿Tenéis conciertos a la vista?
-Tenemos 3-4 conciertos cerrados y esperamos que la cosa se anime con la llegada del verano.