El presunto yihadista de Durango propinaba “duras palizas” a su pareja para lograr su conversión

El arrestado, de 33 años, está acusado de formar parte de una estructura de reclutamiento y adoctrinamiento que animaba a atentar en España y otros países de Europa. Las mismas fuentes califican su carácter de”especialmente violento e impulsivo”.

Agentes de la Policía Nacional le localizaron en el piso de un amigo en el barrio de Traña-Matiena y, desde allí, fue trasladado al piso compartido del edificio conocido como la Casa Social de Durango donde vivía. Ubicado en la calle Kanpatorrosteta, se trata de un espacio de acogida temporal para personas en situación de necesidad.

Este domicilio fue registrado en su presencia durante más de cuatro horas y se intervino abundante material, principalmente en soporte informático. Al detenido se le relaciona también con el mundo de las drogas a pequeña escala.

Conectados online

Junto a él, en una intervención conjunta de la comisaría general de Información de la Policía Nacional y autoridades marroquíes, también fue detenido en Lorca (Murcia) un senegalés de 21 años que había acudido a trabajar de temporero, pero que tenía su lugar de residencia en Bilbao. Este último también propinaba “extremas” palizas a su esposa como parte de su visión de la mujer sometida a la ley Sharia.

Dentro de la misma operación también se arrestó a otros tres hombres en Castillejos, una localidad marroquí próxima a Ceuta.

Los dos detenidos en el Estado pasarán mañana a disposición judicial en la Audiencia Nacional. Ambos estaban conectados entre ellos de forma online, y actuaban como “amplificadores del mensaje violento de Daesh en Internet para aumentar la comisión de atentados en Occidente”.

También divulgaban material sobre el uso y manejo de armas blancas dirigidos a la autocapacitación y a enseñar técnicas de decapitación.