“Se ha hecho justicia y me han readmitido en el puesto del que nunca tuve que ser despedida”

Carta enviada por Ainhoa Mendo, la madre de una niña con Síndrome de Angelman que fue despedida tras pedir una reducción de jornada. Ayer, dos días después de hacerse pública su situación, fue readmitida.

Kaixo denoi

Antes de nada, me llamo Ainhoa Mendo y quiero agradecer el cariño y la solidaridad recibida durante todo este tiempo.

Ha sido duro, no lo puedo negar, pero es más llevadero cuando te sientes arropada. Eskerrik asko, benetan.

Es inaceptable que en pleno siglo XXI, cuando se habla tanto de la igualdad, todavía se nos castigue por querer conciliar nuestra vida laboral y familiar, y que mayormente sigamos siendo las mujeres las que sufrimos este tipo de situaciones.

En mi caso, la situación es más compleja si cabe. Mi hija tiene Síndrome de Angelman y, por ello, tiene mayor dependencia que otro niño o niña de su edad. Decidí que debo dedicarle más horas a mi hija, bien porque ella lo necesita, pero también porque quiero y se lo merece.

Se ha hecho justicia y al final se me ha readmitido en mi puesto de trabajo del que nunca tuve que ser despedida.

Quiero terminar agradeciendo a todos y todas vuestro apoyo porque vuestra solidaridad ha sido indispensable en todo este proceso. Agradezco a la Asociación Síndrome de Angelman por estar siempre ahí, a Andereak, Bilgune Feminista, Geu Be, Sorginola, Zapaburu, Zelaieta Eskolako Trokaz Guraso Elkartea, Euskal Herrian Euskaraz, Batukandra, Mendibeltz, Erreharria, Atara Zarata antzerki taldea, LAB, ELA, EHNE, CC OO, STEILAS, ESK, CNT y empresas privadas y partidos políticos que habéis mostrado vuestro apoyo e interés.

Pero, sobre todo, a todos vosotros y vosotras por venir, por agitar las redes sociales, por preocuparos, por ofenderos, por enfadaros y por solidarizaros.

Eskerrik asko

Ainhoa Mendo